Desde el estreno de la primer película de The Star Wars (que ese era su nombre en aquella época) en 1977, la franquicia puso una pata en el mundo de los cómics. Desde ese momento, casi simultáneo a la aparición del film en los cines, y de los muñecos en las tiendas, es que hay historietas relacionadas con este complejo universo. Con mayor o menor importancia en el canon, obviamente, según la época.
El puntapié inicial fue realizado por Marvel Cómics, en pleno auge de los años setenta, dónde la editorial inundaba el mercado con cualquier cosa que apareciera por ahí, sobrepasando los cómics de superhéroes y sumando varias franquicias surgidas en otros medios. El caso de Star Wars fue paradigmático, porque hasta que se dice que fue -su éxito- un salvavidas económico importante para la casa de las ideas en ese momento. El cómic en si, sacando la inevitable adaptación del film es algo difícil de digerir hoy, muy chato, con poca o nula información sobre lo complejo que sería después este universo, y llenando una revista mensual con bastante fruta. Incluso luego del estreno de las otras dos películas, con novelas publicadas y mucha más data, los cómics de Marvel durante los ochenta (época rupturista si las hubo del cómic yanqui) de Star Wars fueron MUY conservadores. Moviéndose poco de los límites de las películas y con esa regla (escrita creemos) de nunca explorar nada más allá de The return of the Jedi.
Llega 1991, seguramente uno de los puntos más bajos de popularidad de Star Wars, y las ventas moderadas, la falta de interés y la lejanía con el estreno de alguna película hace que Marvel pierda o no renueve la licencia, para que caiga en manos de la joven editorial Dark horse. La editorial del caballo Negro era LA editorial de las franquicias, como lo demostraban los éxitos de Aliens o Predator en historieta, y terminan haciéndose con los derechos para publicar la creación de George Lucas, con la posibilidad, ahora sí, explorar el antes, durante y después de las tres películas oficiales (touché Marvel!). El cómic que inicia todo este nuevo recorrido es, justamente, Dark Empire.
Dark Empire (Imperio Oscuro) es la primer historia que se publica ambientada temporalmente luego de los eventos de la trilogía original y es, quizás, la secuela que muchos hubieran querido ver en cine. Cuenta una historia pocos años después de Return of the Jedi, con Luke como un Jedi en plenitud y Han y Leía, casados y con hijos pequeños, liderando a los rebeldes. Resulta que la caída del emperador y Darth Vader no desactivó instantáneamente al imperio que sigue insistiendo con controlar parte de la galaxia, y la nueva república sigue teniendo problemas para terminar de eliminar esos resabios que por momentos tienen mucho peso y muchas flotas aún en su poder. La trama lleva a una fracción rebelde (con Han y Leía) a rescatar a otra que está en desventaja en un planeta remoto (con Luke). Pero Luke pide a sus amigos que salven a la flota y se retiren porque un llamado de "la fuerza" lo llevó hasta ese lugar, en pleno territorio enemigo, y es su deber responder. Escépticos, sus amigos le hacen caso y se van. Luke se verá cara cara con el lado oscuro, que es la fuerza que lo está atrayendo hacía una nave, en la que se encuentra ni más ni menos que un resucitado emperador Palpatine, que revela que lo que vimos morir fue solo uno de sus clones, y sigue comandando y alimentando las flotas imperiales desde las sombras. Intentando comprender la naturaleza de ambos lados de la fuerza, y creyendo que será el único modo de eventualmente derrotarlo, Luke Skywalker se deja seducir por el lado oscuro y jura lealtad como el discípulo de Palpatine, en la escena más icónica de ésta saga (14 años antes de presenciar una escena similar en Revenge of the Sith).
Leia va a empezar a experimentar "la fuerza" y sentirá la necesidad de ir a salvar a Luke, en una misión suicida con Han y Chewie, mientras los rebeldes se las ven con los "Devastadores de mundos", unos aparatos que hacen pelidecer a la estrella de la muerte con su poder destructivo. Cómo desactivar éstos, y los planes macabros que Palpatine tiene para los hermanos Skywalker (y su descendencia), más la caída de Luke al lado oscuro, son los ítems a resolver en el resto de la historia.
Estamos ante un cómic mucho más jugado que todo lo hecho anteriormente por Marvel, apoyado en gran medida por la posibilidad de explorar aquello que el lector quiere ver: qué pasó después de las películas. Pero aparte de eso, es un cómic con una narrativa más acorde a la época, con un halo de oscuridad muy interesante que sobrevuela todo lo que ocurre. Todo se ve ominoso y lúgubre, cómo queriendo transportar a esa sensación del lado oscuro que envuelve al protagonista. Y se logra en gran medida por un dibujo que transmite una versión bastante dramática de los actores que conocemos del cine, y, especialmente, un coloreado que nos hacen sentir esa oscuridad en todo momento. Una elección de paleta de colores muy particular, cómo si todo estuviera oscuro todo el tiempo y se iluminará puntualmente con luces verdes o azules. Muy interesante. Escribe Tom Veitch y dibuja entinta y colorea Cam Kennedy.
Lamentablemente todo esto forma parte ahora de lo que se conoce como "Leyendas", o historias no canónicas, porque lo que ahora se toma como válido es aquello que produzca Disney/ Marvel, de 2015 en adelante, pero quién nos quita lo bailado. En breve, reseña de Imperio Oscuro II (la secuela de la secuela)
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